• Cuando estoy viviendo con sensación general de tristeza, malestar o sufrimiento prolongado y, a pesar de esforzarme, no logro salir adelante.
• Cuando tengo un problema concreto que me causa dolor y me preocupa mucho, y no sé cómo resolverlo o afrontarlo, aunque lo esté intentando.
• Cuando mis relaciones con los demás, sobre todo con los más cercanos, se van deteriorando, y no sé qué hacer para mejorarlas, o no tengo fuerzas para hacerlo.
• Cuando siento la necesidad de crecer como persona, de mejorar mi autoestima , de vivir valores y capacidades que sé que tengo, pero están bloqueadas y no sé cómo utilizarlas en mi vida.

En ocasiones es necesario un tratamiento farmacológico, que ayude a calmar la angustia, la ansiedad, la confusión, el agobio,  la depresión … que sentimos, para que nuestro organismo se regule y equilibre; el psiquiatra trata este aspecto médico.

El psicólogo trabaja con las emociones, sensaciones internas: angustia, dolor, culpa,desesperación  … , así como con el pensamiento y la conducta, para posibilitar el equilibrio psicológico de la persona.

No son tratamientos incompatibles: o sólo el psiquiatra, o sólo el psicólogo. En algunos casos es necesario llevar ambos tratamientos a la vez, de modo que se complementan y potencian mutuamente, logrando así una mayor eficacia.

Es un encuentro personal donde la cercanía, comprensión, apoyo y empatía que ofrece el terapeuta, facilita una comunicación confiada y profunda por parte de la persona que acompañamos, para explorar cómo vive y cómo siente lo que le preocupa. Dicho encuentro posibilita un proceso de conocimiento y crecimiento personal, así como una clarificación sobre qué hacer para resolver o decidir lo que necesita su vida

Es una relación sincera, profunda y comprensiva, donde el terapeuta pone su empeño en  entender lo que le ocurre a la persona que pide ayuda, percibir cómo lo vive internamente y  cómo le afecta, y recibirlo con respeto y cercanía. Esta actitud lleva a una relación de gran confianza,  desde la que explorar juntos nuevos caminos más funcionales, sanos y resolutivos, que  producirán cambios positivos en la persona y en sus relaciones.

La duración de la psicoterapia, depende de cada persona, de la intensidad de su malestar, y de hasta dónde desea profundizar.

Asistir regularmente a las sesiones es una gran ayuda desde el principio, y permite a la persona eliminar o aliviar los síntomas, así como entender lo que le genera ese dolor, conflicto o insatisfacción (entender nos ayuda a manejarlo de modo más efectivo).  Si quiere consolidar el proceso y lograr  cambios más consistentes, necesitará más tiempo, lo cual se traducirá en mayor calidad de vida y  herramientas más funcionales de gestión personal y grupal.

Como terapeutas, entendemos, respetamos y apoyamos a la persona cuando decide acabar su proceso de psicoterapia. Tratamos de adaptarnos en lo posible a la situación económica, la falta de tiempo o cualquier otra dificultad, para que la finalización del tratamiento, no se deba a causas ajenas al propio proceso terapéutico, sino que sea el resultado de una decisión tomada desde la libertad y el deseo genuino de la persona.

De acuerdo a la filosofía del equipo THuS, nadie se queda sin  terapia por motivos económicos. Seguimos un criterio económico flexible y solidario en las situaciones que así lo requieren.

¿Estás pensando en hacer terapia? ¿Tienes dudas, incertidumbre y no sabes cómo gestionar tu problema? ¿No sabes si el tratamiento psicológico puede ayudarte? 

Iniciar una terapia es una decisión muy importante, por eso en Psicólogos THuS te ofrecemos una primera consulta gratuita. Durante esta primera consulta informativa de treinta minutos de duración nuestro equipo de profesionales valorarán tu situación, te asesorarán y responderán a todas tus dudas con absoluta profesionalidad y confidencialidad.  Contacta con nosotros y pide tu primera cita gratuita.

¡Estaremos encantados de resolverte cualquier duda!

Somos un equipo de psicoterapeutas, con amplia experiencia profesional y sólida formación, que ofrecemos atención psicológica, desde la cercanía y comprensión profunda de lo que le ocurre a la persona que nos pide ayuda, implicándonos con ella en el proceso de superación de su sufrimiento, buscando su crecimiento personal, y ayudándole a desarrollar herramientas que le permitan afrontar por sí misma, situaciones difíciles o conflictivas.